Jesus

Yo busco a Jesús. Esa es hoy es mi verdad. El resto no me importa. Lo que quiero es conocerlo a él, cada día que me quede de vida en esta tierra. Saber que esta a mi lado, buscarlo como mi maestro, mi amigo, el tipo que me banca. Ya no me importan otras cosas, porque lo he perdido todo, y sin embargo lo tengo todo. A veces me pregunto, para que vine a este mundo?.

Nacì en un hogar dividido, como tantos otros, tuve una infancia de soledad y marginacion, que me recuerda a“Tarzán”. Un humano criado porgorilas. Lo mio fue asi. Despues vino la traumática adolescencia, las experiencia sexual y un camino que me incitaba a creer que habia otra cosa más allá de lo que me enseñaba la religion.

Sentia facinación por las religiones. Aunque solo anclé en el catolicismo. Niñez en colegio de curas, donde me salve de ser abusado de pedo. De regreso al hogar, la nada, en donde no habia nada.

Con los años, Jesús fue una opción. La religión me cargó con el resto. En tanto me hacia escapadas al ocultismo o a la new age, que eran el baldio prohibido. Ahi conoci a gente que elegia "maestros" "shwamis" o "iluminados" de carne y hueso para seguir. Cuando los conocia, encontraba más y más atractivo a Jesús, al que no podia ver pero que sin embargo se mostraba, con otras caras, con otras señas e imagenes.

La vida me fue ablandando y de rebelde pasé a ser un padre de familia, y me olvidé de mi busqueda. Hasta que llegó la crisis de la mediana edad. Y hoy volví a buscarlo, y encima se dejó encontrar con todo.

Ya no estaba en la parroquia, ya no estaba en la catedral, ya no estaba (no digo que no se de una vuelta de vez en cuando) en la Iglesia de "Bendito 16" o al menos yo no lo encontré.

Leyendo me enteré que un grupo, Iglesia Bautista, evangelicos, protestones o no se como se les dice desde el catolicismo, "hermanitos separados" ah si!, lo ponen a Jesús como el centro de sus enseñanzas. Y entonces comencé a leer lo que decia un pastor. Y me enganche. Solo sé que estoy -ahora- aprendiendo a balbucear unas palabras a través de la oración. Lo importante es tenerlo a el en mi corazón, el resto me lo invento yo.